Seré la Villana.

Una versión de mí alguna vez creyó que necesitaba contar mi lado de la historia cada vez que alguien me cuestionaba. No quería ser vista como la villana, porque siempre he estado muy consciente de mis intenciones, y mis sentimientos eran puros. Sin importar que yo me muestre de la mejor manera posible, la gente aún tiende a ponerte bajo una luz negativa. Yo estoy aquí por la verdad. Siempre he querido que la verdad se sepa, que mi corazón sea visto.

Se ha compartido algo y la narrativa fue cambiada por quienes más estaban involucrados. Pero la verdad no cambió. Yo sé cuál es la realidad; las personas siempre elegirán creer lo que quieran creer. Algunos ya decidieron su versión de la historia, y otros han sembrado esa creencia en su mente hasta que la sienten como cierta.

Pero la verdad está ahí.

La verdad es que yo no estaba tratando de demostrarle nada a nadie. No buscaba validación para justificar de dónde venía. Algunas verdades no necesitan pruebas para ser reales. Me permití ser la villana en su historia; estoy satisfecha de ver con claridad y evitar cualquier futuro dolor. Aquellos que no sanan, sin importar la narrativa que se cuenten ellos mismos, si alguien no pudo ver tus sentimientos, tu dolor, o entenderte—me pasó a mí—esa es la suficiente claridad para salir de ese cuento. Mis sentimientos son válidos. Tus sentimientos son válidos. La paz llega al entender que no toda historia necesita defensa: a veces, la verdad es suficiente.

No guardes culpa, amargura ni resentimiento hacia la experiencia, la persona o hacia ti misma. Reconoce el catalizador que te llevó a mostrar tu resiliencia y crecimiento. La misma tormenta que sacudió tanto en ti también trabajó para despejar tu camino.

VALERIA

Next
Next

Sometimes We’re Still Bleeding.